Manifiesto de la Asociación de mujeres Musulmanas de Albacete
Y el centro cultural islámico de Albacete
El Hiyáb (velo) no impide que la mujer cumpla su papel dentro de la sociedad, pero sí obstaculiza los intentos de los inmorales que sólo valoran a la mujer por sus encantos físicos.
El Islam rechaza la utilización del cuerpo desnudo de la mujer como objeto-mercancía.por lo cual la mujer en el islam está en su derecho de elegir seguir esta doctrina o no, de hecho vemos por la calle musulmanas con o sin velo. Entonces eso no deja lugar a duda de que la mujer es libre de elegir si lleva o no el velo, solo cabe recordar de que tenemos una constitución donde en el artículo 16.1 nos garantiza la libertad religiosa.
Obviamente, que una alumna lleve un velo en una escuela pública no ofende los derechos fundamentales de los demás, ni tampoco el orden público. El orden publico es un concepto vago que la ley dibuja como un triangulo con tres lados: la seguridad, la sanidad y la moralidad pública. Aunque sea un concepto abstracto, la más clara concreción del orden público es la ley vigente. Las expresiones de la libertad religiosa deben realizarse, dentro del marco de la ley.
No hay ninguna ley que prohíba a las alumnas portar el velo en la clase, el derecho a ser escolarizado en condiciones dignas prima sobre cualquier otro tipo de consideraciones como el derecho del centro público a imponer una normativa respeto a la vestimenta.
MANIFESTAMOS:
1. Nuestra profunda sorpresa ante la polémica generada en un país como el nuestro, oficialmente aconfesional y supuesto defensor de los intereses de sus conciudadanos/-as.
2. Nuestro desencanto al percatarnos del profundo desconocimiento sobre el Islam y los musulmanes que han demostrado algunos políticos de este país y directores de centros educativos, a pesar de los reiterados esfuerzos que se están llevando a cabo para que no sea ese desconocimiento una barrera para el buen entendimiento.
3. Nuestro firme rechazo ante el condicionante de tener que renunciar a la libertad de decisión, a la libertad personal, para tener acceso a la escolarización, al trabajo o a cualquiera de las facetas que implica el vivir en sociedad.
4. Nuestra indignación ante la posibilidad de que las mujeres musulmanas sean obligadas a vestir como otros desean, porque han elegido libremente vestir como ellas quieren. Entonces ¿Por qué se pretende arrebatarles su libertad personal?
5. Nuestro recuerdo a que entre las obligaciones de un Estado democrático se encuentran las de garantizar la igualdad de oportunidades, pero sin coartar la libertad del ser humano, sea hombre o mujer.
6. Nuestra insistencia en que ponerse un "hiyab"(velo), como elección personal e intransferible, no forma parte de las costumbres de otros países, sino de las enseñanzas del islam. De lo contrario, no tendría sentido que mujeres españolas musulmanas decidieran ponérselo libremente en este país, en el que su uso no es habitual.
7. Nuestra felicitación al subdirector general de coordinación y promoción de la libertad religiosa por su última declaración donde hace recordar el derecho a la libertad religiosa en este país que muchos se ve que lo desconocen o no lo acatan, le felicitamos por su coherente y acertada decisión de hacer entender de que prevalece antes el derechos a escolarizar ante cualquier otro asunto, sin condicionamiento alguno.
Por último esperamos y deseamos que prevalezcan la coherencia, la tolerancia, la libertad personal y el respeto por los derechos fundamentales.
Concentremos pues nuestros esfuerzos para lograr la Integración, no la Asimilación, ni la Marginación (Teorías de Berry y Kim, 1988), para conseguir enriquecernos aprovechándonos de la pluralidad y diversidad cultural, personal, religiosa,... de la que disponemos hoy por hoy.
